No son horas
Una vez más en la carretera con Luigi, en esta ocasión tocaba ir a Zürich para ver a unos clientes y de paso revisar nuestras cuentas cifradas y cajas de seguridad, todo en orden. El mismo orden del que la ciudad hace gala para quedarse literalmente muerta más allá de las diez de la noche. En nuestro caso llegamos al Hotel Savoy Baur en Ville sobre las once y no nos quedó más remedio que visitar el Bar Savoy ya que ni siquiera los restaurantes del establecimiento (Orsini y Baur) estaban abiertos.
Una apuesta segura
Recordando mi pasado vienés opté por Wiener schnitzel (tampoco había mucho más donde elegir), una de las pocas aportaciones relevantes de la cocina austriáca (además de la Sachertorte) que según dicen trajo de Italia el Mariscal de campo Radetzky (el de la marcha). El obvio maridaje fue una cerveza suiza (Hürlimann) desconocida por mi hasta entonces y que sumamos a nuestra cruzada particular. No estuvo mal del todo teniendo en cuenta que la alternativa era cenar a base de patatas fritas y chocolatinas del minibar.
Ficha
Ubicación: Poststrasse 12, Zürich (Tranvías 2,6,7,8,9,11,13 en Paradeplatz)
Lo mejor: servicio atentísimo
Lo peor: carta extremadamente corta
Recomendamos: procurar llegar más pronto a la ciudad para dsfrutar de una cena en condiciones
Precio: €€€€ / €€€€€
Puntuación: 3,75 / 5
Technorati Tags: Hotel, Restaurant, Switzerland, Zürich
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